"ASÍ COMO DIOS NO PUEDE ENVIAR A UNA NACIÓN O PUEBLO una bendición más grande que la de darle pastores fieles, sinceros y rectos...
...la maldición más grande que Dios puede enviar a un pueblo de este mundo, es darles guías ciegos, no regenerados, carnales, tibios y no calificados, que predican con liviandad."
-George Whitefield
No hay comentarios:
Publicar un comentario